Capitulo
final
Pov Mía
El viento soplaba fuerte, la lluvia caía con impotencia y
nosotros corríamos a lo que seria sin duda una masacre completa. Me
aferre aun mas a la mano de Alec para que no me dejara escapar y sobre todo
para que me diera muchas fuerzas, confianza y seguridad.
-
Todo
ira bien- me dijo en un susurro tranquilizador
-
Mientras
este a tu lado, estoy segura de que todo ira bien- hable y le di el ultimo beso
antes de que saltáramos por la muralla continua al colegio y llegáramos al
castillo Vulturi. Al instante nos percatamos que algo andaba mal. Muy mal.
-
Mierda,
se han adelantado!- grito Jane y entro disparada.
Al llegar a los pasadizos subterráneos todo era un
caos completo. Por todos lados habían neófitos luchando contra vampiros de la
corte. Me solté de la mano de Alec y sin pensarlo dos veces me lance a
uno de los neófitos que estaba a punto de decapitar a uno de los Vulturi. Desde
ese momento todos los que llegamos comenzamos a luchar mientras nos abríamos
paso para llegar a la estancia donde los Vulturi solían alimentarse. Muchas
cabezas, brazos y piernas estaban desperdigados por todo el suelo
haciendo que todo fuera una imagen grotesca e inhumana. Jamás había estado en
una lucha de tan grande magnitud y no entendía como Alec y los demás podían
soportar esto sin sentir nauseas o miedo
-
Tenemos
que llegar a la sala cuanto antes, allí esta la verdadera pelea- dijo Alec
mientras que sin inmutarse ni un solo segundo le arranco la cabeza a una neófita
que apenas y tendría 13 años. “Son malos” me obligue a recordar para no tener
lastima por ellos pero era difícil al saber que ellos no tenían la culpa de sus
acciones y tampoco opción alguna.
Alec me tomo de la mano y comenzamos a correr entre la
gente. Llegamos a la estancia unos cuantos: Jack, Will en forma lobuna, Jane, Pascal,
Alec y yo mientras que los otros acaban con los neófitos que quedaban.
A pesar de que la pelea estaba casi dominada por los Vulturi
en los pasillos aquí era todo lo contrario. Al no tener mi campo de fuerza todo
el ejercito de Diana torturaba a su antojo a los Vulturi con sus diversos
dones.
Observe a la mujer que lanzaba gritos desgarradores a unos
metros de mi. Era Sulpicia y el que la lastimaba era un chico rubio que hacia
que toda la piel de Sulpicia se volviera verdosa y extraña.
-
Basta!-
grite con mucha fuerza y sentí como mi campo de fuerza se extendía como una
niebla selectiva que solo elegía a los nuestros para tenerlos bajo su protección.
Pero aun que los protegería de los dones no podría
hacer nada mas, eran demasiados a los que proteger como para poder poner el
campo de fuerza sólido. Con horror observe que el muchacho rubio al darse
cuenta que su don ya no surtía efecto ahora iniciaba con la decapitación de la
dulce Sulpicia que estaba tan débil que ni moverse podía.
-
No!-
grito esta vez Alec con un tono de desesperación y corrió para ayudarla.
Antes de que el pudiera hacer algo una niña pequeña se interpuso en su camino.
-
Alejandra!-
dijo con sorpresa Alec y la envistió para no perder mas tiempo. Se enzarzaron
en una pelea mientras yo buscaba desesperada con la mirada a Sulpicia pero esta
yacía ya muerta. Con horror trate de buscar a alguien que pudiera ayudarme pero
Aro no estaba por ningún lado ni los otros Vulturi.
No tarde mucho en volverme la nueva presa de aquel vampiro
rubio que ya estaba corriendo hacia mi con el rostro desencajado por el hambre
y el placer de matar. Sabia muy bien que si luchaba con alguien mi don se
debilitaría y en estos momentos era lo único que nos protegía del control
completo de Diana. Sentí como la fuerte mano del vampiro me daba un gran golpe
en el estomago, contraataque sin poder hacer mas con un gran mordisco en el
cuello que hizo que el vampiro retrocediera un poco. En ese instante apareció
Jack con la ropa rasgada y un gran arañazo en el rostro que sangraba
mucho.
-
Yo
me encargo, tu sigue haciendo lo tuyo- dijo el y me sonrío débilmente antes de
que se abalanzara sobre el muchacho rubio y comenzaran a luchar. Sabia que Jack
era semi humano pero aun así no se inmuto ni un solo instante en luchar.
-
De
mi no te escaparas tan fácil- dijo Diana con esa voz tan melosa justo detrás de
mi. Sin que pudiera hacer nada me lanzo al suelo. Sentí en ese instante como
perdía la concentración y mi campo de fuerza estaba a punto de romperse.- Ahora
Daniela!- grito Diana al percibir que yo estaba algo distraída.
Su pequeña hermana corrió hacia mi y me miro penetrantemente
pero yo, aun que estaba tirada en el suelo me mantuve fuerte y esta vez mi
campo de fuerza resistió a su ataque.
-
No
puedo- grito frustrada la niña
-
Ahora
si- dijo Diana y me mordió el cuello sacando un gran pedazo de carne y lanzándolo
por los aires para que justo yo lo viera.
Grite de dolor pero aun así no deje de concentrarme en
el campo de fuerza. Estaba muy conciente que si luchaba, si hacia algo para
defenderme mi campo de fuerza se rompería por el don de esa niña y seria muy
difícil de reconstruirlo. Trate de girar con mi cuerpo para que por lo
menos tuviera un poco mas de tiempo pero Diana apoyo todo su peso sobre mi y no
me dejo moverme ni un solo centímetro.
-
Si
no puedo romper tu campo será mejor matarte- dijo Diana con malicia y sentí que
otra vez mordía mi cuello, esta vez con mucha mas fuerza. Gemí de dolor y serré
los ojos.
-
Déjala
en paz!- grito Marcus
-
Diana!-
grito con desesperación la pequeña niña. Abrí los ojos para ver lo que ocurría
y descubrí que Marcus tenia como prisionera a Daniela.
-
Deja
a Mía- hablo Marcus con una voz muy fría y jalo con fuerza el cuello de la niña
haciendo que esta chillara por el dolor. Diana con rabia dejo de morderme y al
instante se alejo de mi.- eso esta mejor- Dijo Marcus, sonrío y decapito a
Daniela con una sola movida de mano. Diana grito de puro horror al ver que su
hermana estaba muerta y sin pensarlo ni un segundo se abalanzó sobre Marcus.
-
Mía…Mía-
escuche a Alec acercarse. Me giró con cuidado y me tomo entre sus brazos.
Estaba herido y con la ropa rota. Al mirarme prácticamente se quedo congelado
con una mirada de mucha preocupación. Sin decir nada se rompió rápidamente la
chaqueta y me la amarro alrededor del cuello.
-
Estoy
bien- dije casi en un susurro inaudible, la garganta y en si el cuello me dolían
mucho- ayuda a Marcus por favor.
-
Primero
te pondré segura!- dijo Alec decidido, me cargo en brazos y comenzó a
adentrarse en la batalla.
-
Que….Que
haces?- pregunte con debilidad
-
Tu
solo confía en mi, conozco un lugar- hablo el y esta vez comenzó a
caminar por la zona mas oscura, la que se encontraba detrás de los tronos y en
la que no se libraba una pelea tan acalorada como en el resto de la estancia.
Con suavidad Alec me dejo en el suelo, apoyada a la pared. Busco con
desesperación algo en la pared. – donde esta, donde esta…- se preguntaba en
susurros.
-
Que
buscas?- pregunte en un susurro. pero no recibí respuesta inmediata.
-
Lo
encontré- dijo con una sonrisa y saco una tapa con rejas de metal.- ahora vas a
estar bien. Por favor no salgas- me dijo Alec y me adentro al hueco de
ventilación o eso es lo que parecía. Entre algo encorvada y un fuerte dolor en
el cuello hizo que gimiera débilmente. Pero estar en este hueco era lo mejor,
por lo menos hasta tener algo de fuerzas.
-
Gracias.
-
Te
amo. Regresare, lo prometo- dijo el casi frenético al ver mi cuello y luego me
cerró con las rejas. Me quede en penumbra total por algo de 10 minutos en los
que solo escuchaba gritos, crujidos de extremidades rotas y choques de cuerpos.
Puse la mano debajo de mi cuello y sentí la hendidura en mi cuello, profunda y
dolorosa, preferí no tocarla mas solo hice un nuevo mas fuerte con la
tela que me había puesto Alec.
No pasaron ni 2 minutos y alguien arranco la reja que me
protegía y me jalo de los cabellos bruscamente.
-
Hasta
que al fin te encuentro cobarde.- dijo Diana y me arrastro hasta llegar a una
zona iluminada. Yo no paraba de gritar y moverme de un lado para otro pero era
muy difícil con la herida del cuello.
-
Suéltame-
dije arañando sus manos con fuerza y al fin logre librarme de ella que lanzó
una blasfemia contra mi mientras se tocaba la muñeca. Le lancé una mirada de
indignación mientras me paraba con dolor. ella me sonrío ampliamente.
-
Eres
tan estúpida….- dijo de repente- has estado tan concentrada en tu propio dolor
que te olvidaste de proteger a los demás.- concluyo con una sonrisa
escalofriante.
-
O
no…no- dije con desesperación mientras veía a mi alrededor. El silencio se había
cernido en aquel lugar. Los vampiros del aquelarre de diana tenían a los demás
atrapados entre sus manos y listos para decapitarlos.
-
Todo
es tu culpa…- me dijo Diana
-
No
la escuches!!- grito Alec y recibió una fuerte descarga eléctrica de la chica
que lo tenia atrapado. Grito de dolor.
-
No
por favor, a Alec no le hagan daño- dije con la voz entrecortada.- haré lo que
sea Diana, por favor- dije rápidamente. Diana me miro por un instante en
silencio mientras analizaba mi propuesta.
-
Si
mueres prometo que no le haré nada a Alec ni a tus amiguitos. Solo acabare con
los Vulturis o con aquellos que no se rindan.- me quede helada por un segundo y
mire furtivamente a Alec que ya casi no tenia fuerzas. – dime…
-
No
lo hagas Mía, no vale la pena…- dijo Jack
-
Lo
lamento- dije solo con los labios pero en silencio.- has lo que quieras con
migo, pero déjalos libres a ellos
-
No!!!-
grito Alec y yo le guiñe el ojo fugazmente para que se preparara. Diana sonrío
y me tomo del cuello para arrancarme la cabeza.
-
Tu
muerte será lenta y ah…una cosa, jamás cumplo mis promesas- dijo Diana con
malicia
-
Yo
tampoco….
Entonces toda paso muy rápido, con mi don de telequinesia
rompí cada uno de los vitrales que existían en la estancia. Los vidrios volaron
por todas partes y ese fue el tiempo suficiente para que volviera a poner mi
campo de fuerza. Hice que uno de los vidrios del suelo llegaran a mi mano y con
mucha fuerza corte la mejilla de diana que me soltó con dolor y amargura.
-
idiota!-
grito y me dio un golpe tal que sentí que mi cuello se rompía aun mas. Caí al
suelo con un golpe sordo y solo pude escuchar lo que sucedía.
-
Leo,
Sam! Que hacen acá?- pregunto asombrado Jack
-
Venimos
a ayudar, que no se nota?- pregunto Leo. y escuche como un lobo, de seguro Sam
hacia un sonido tipo gruñido y risa.
-
Tu
padre te matara cuando te vea- dijo Jack y al instante escuche un golpe sordo.
Abrí los ojos y vi como todos mis amigos se habían puesto en un circulo para
defenderme.
-
Y
no piensan ayudarla?- pregunto Leo que peleaba con una vampiresa y le rompía el
cuello con habilidad
-
De
esta manera la ayudamos- dijo Alec y me sonrío.
Los nuestros ganaban la lucha por el momento pero estaba
segura que Diana escondía algo. Y en ese instante lo descubrí, la luna llena
ilumino la sala y un aullido desgarrador se escucho junto al desgarramiento de
piel y ropa.
-
que
es eso?- pregunto Alec alarmado y como pudo desmembró al vampiro con el que
luchaba y me ayudo a pararme justo al instante que vi como un monstruoso hombre
lobo parado de dos patas y cuerpo desproporcionado venia corriendo hacia
nosotros. en un abrir y serrar de ojos tomo al licántropo mas cercano a el, Sam
y la partió a la mitad con su fuerza descomunal.
-
Sam!!!-
grito Leo y se lanzo al lobo que le hinco sus fuertes dientes en el cuello,
trato de succionar como un vampiro pero como no salio nada lo decapito.
-
Que
es eso Alec, que es eso?- pregunte asustada.
-
No
lo se. – hablo el y no pudo decir mas por que aquel ser extraño lo
intersecto.
-
Es
un hijo de la luna hibrido- dijo Diana que se lazaba a mi y me hacia caer con
fuerza para que no pudiera ayudar a Alec- la bestia mas fuerte de este mundo…..
y adivina que, es solo es mío.
-
Estas
loca- hable con desesperación- loca en verdad loca.
-
Solo
quiero tener la corte para mi, acaso eso es tan complicado? Los humanos tienen
que saber lo que somos, nosotros somos mas poderosos que ellos, debemos ser sus
lideres y para eso solo necesito acabar con ustedes.- me giro para que pudiera
verle los ojos mientras me mataba y tomo con fuerza mi cabeza. – tus ultimas
palabras.
-
Jamás
ganaras- dije segura y sentí como me estaba desmembrando.
Pov Alec
El extraño lobo me envistió con todas sus fuerzas hasta otro
rincón. Me tomo del cuello y lo ajusto con fuerza, mucha fuerza.
-
Donde
esta- hablo en un tono grave y muy gutural
-
Estar
quien?- pregunte con algo de dolor
-
Caio…donde
esta Caio- hablo aquel animal.
-
Aquí
estoy- hablo Caio valiente. Aquel animal me soltó del cuello y volteo a ver a
su contrincante. Caio no estaba solo, a su costado estaba Aro y al otro Marcus.
Los tres mostraban una pinta terrible pero aun asi se enfrentarían a aquel
animal aun que las vida se les fuera en ello.
-
Mía-
le dije a Aro y este abrió un poco mas los ojos para buscarla. El sabia muy
bien que si ella moría no habría oportunidad para ganar.
-
Yo
iré, ustedes encárguense de este- hablo rápidamente Marcus y desapareció.
Todo ocurrió realmente rápido. El animal no quería
darnos tiempo así que envistió sin previo aviso a Caio y le hinco fuertemente
los dientes en el cuello. Caio grito de dolor y Marcus y yo corrimos para
quitarle al animal de encima.
-
suéltalo-
grite con pura impotencia mientras trataba de quitárselo como podía pero era inútil.
-
Alec
utiliza tu don- hablo Marcus y yo trate de hacer lo que me pidió
-
No!!-
grito aquel animal y me dio un fuerte golpe en la cabeza. Caí al suelo algo
atontado y sin poder hacer nada. - Acabaste con mi familia, ahora debes pagar-
hablo aquel animal. Una de sus manos aprisionó su cuello mientras que la otro
jalo con fuerza uno de sus brazos, desmembrándolo. Caio seguía gritando y yo
tuve que concentrarme de sobremanera para poder hacer que mi don de parálisis
invadiera el cuerpo de aquel animal. Antes de que decapitar a Caio, el monstruo
se quedo quieto y supe que mi don había funcionado.
-
Aro
protege a Mía, yo me encargo de esto- dije rápidamente al observar que la
familia de Sam venia a buscar venganza.
Pov Mía
Había llegado el fin, estaba a punto de morir y no me había
despedido de Alec. Todos los esfuerzos habían sido en vano. Al final de
cuentas, Diana había ganado. Sentí un crack y me prepare para el final.
-
Suelta
a mi hija!- hablo Marcus con fuerza y segundos después Diana estaba siendo
empujada por aquel líder Vulturi que me había dicho “hija”
-
Ella
no es Angélica, Marcus, no lo olvides- dijo con malicia Diana que se paraba rápidamente.-
aun que admito que es idéntica, y tiene esa misma mirada de miedo cuando esta a
punto de morir- hablo con una sonrisa macabra.
-
Fuiste
tu…- hablo Marcus con estupefacción al entender por fin quien había
matado a su hija.
La pelea ahora se había centrado solo en ellos dos, la mayoría
de los guerreros de Diana habían muerto y los pocos que quedaban estaban siendo
decapitados. Era un hecho, estaban por perder. Aun no podía ver a Alec pero
algo me decía que seguía vivo, lo sentía. Marcus envistió a Diana con todas sus
fuerzas al mismo momento que Aro venia y me tomaba de los brazos para que
pudiera pararme.
-
Ella
fue….ella mato a Angélica- dije en un susurro y sentí como Aro tensaba sus
manos alrededor de mis brazos. Entonces no hubo que saber mas, la verdad cayo
por su propio peso.- y tu lo sabias…- dije con la voz fría. Me aleje de Aro y
lo vi atónita.
El grito desgarrador de Marcus me quito de la ensoñación. Vi
entonces como Diana sonreía ampliamente mientras le clava otro vidrio en el
estomago.
-
Marcus
no te rindas!- grite y ataque a Diana. No importaba si moría en el intento,
tenia que salvarlo a el.
La mordí fuertemente en el cuello y las dos caímos al suelo
revolcándonos en los vidrios. Como pude tome uno y se lo clave con todas las
fuerzas que tenia en uno de sus ojos. Diana grito llena de ira y me mordió el
hombro, pero ya casi no tenia fuerzas. Marcus la levanto rápidamente y la tomo
entre sus manos para por fin decapitarla. La sala de los tronos estaba en
completo silencio. Sentí como venia Alec a mi lado y me ayudaba a pararme.
Diana rió con fuerza.
-
Antes
de que me mates…- hablo y Marcus freno en seco.- yo no fui la única de esta
habitación que mato a uno de tus seres queridos Marcus. Sino pregunta a Aro
cual es su secreto mas guardado.
-
Decapita
ya Marcus!- grito Aro
-
Cual
es?- pregunto Marcus obviando por completo a Aro aun que su mirada estaba
clavada en el.
-
La
muerte de su hermana claro- dijo Diana y rió con mucha fuerza.- hablo Aro, dile
que tu mataste a Didime!- grito.
Aro ya no soporto más. Corrió hacia Diana y con un fuerte y
certero zarpazo le quito la cabeza. Todo el mundo estaba en silencio. Nadie podía
creer lo que acaba de decir Diana. Marcus estaba parado, sin expresión en
el rostro y aun con el cuerpo inerte de Diana en las manos.
-
Eso
es cierto?- pregunto Alec. Aro sonrío nerviosamente y dio unos pasos para atrás.-
Contesta Aro, eso es cierto!- grito Alec y se acercó mas a el.
-
E
importa ya? – pregunto Aro.
-
Maldito!-
grite con fuerza. Los reclutas que quedaban formaron dos bandos. Uno que protegía
a Marcus y otro que defendería a Aro. Puse mi campo de fuerza alrededor de los
que apoyábamos a Marcus justo antes de que los gritos, blasfemias y en si la
discusión iniciara. Todo era un caos. Después de todo Diana se había salido con
la suya, había logrado romper el lazo que unía a los Vulturi contando el
secreto mas guardado de Aro. Entre las personas trate de visualizar a Marcus
pero solo logre ver una sombra que salía por los ventanales rotos. Como pude
salí tras el. Los dos estábamos heridos pero Marcus corría muy rápido y me
costo seguirle el rastro. Llegue al fin al bosque y pude ver como se adentraba
en el.
-
Marcus
espera!- grite con las fuerzas que me quedaban y el se quedo estático.- por
favor, espera- dije y corrí hasta el. El hombre volteo a verme, parecía mas
triste que nunca.- lo lamento tanto.- hable. Marcus serró los ojos, agacho por
un instante la cabeza y luego me miro.
-
Yo
también Mía- dijo y no pude mas. Lo abrase con fuerza y el recibió mi abrazo
con mucho amor, como si en verdad estuviese abrasando a Angélica.
-
Que
harás ahora?- pregunte con temor después de algunos minutos. Sabia que Marcus
estaba destrozado pero lo menos que quería era que quisiera quitarse la vida.
-
Iré
al lugar que me hace mas feliz en este mundo- hablo el con una ligera sonrisa y
me acaricio el rostro. – Adiós para siempre Mía, por favor no me busquen jamás.-
hablo el y me dio un beso en la frente.
-
Marcus….
-
Por
favor, solo se feliz con Alec y aléjate de ellos.- asentí con la cabeza y deje
que Marcus desapareciera en el bosque.
Sabia que lo que había pasado entre Marcus y yo era un
secreto. Entendía muy bien que no podía decir nada a acepción de Alec y así lo
cumplí. Regrese al castillo, se había formado realmente un alboroto alli pero
ya no estábamos solos. Los Cullen y otros vampiros habían llegado. Talvez Alice
había visto lo que ocurriría, quizás ellos podrían fin a esto de una buena vez.
Los días pasaron y antes de discutir que pasaría con la
corte, los vampiros que llegaron se encargaron de curarnos las heridas. Sumisos
como nunca, los Vulturi dejaron que los ayudaran, estaban muy confundidos y
sobre todo sin lideres para poder hacer otra cosa que solo acatar ordenes de
los demás. Aro por su parte estaba solo en una habitación, no quería que nadie
mas que Jane y Carlisle lo visitaran. Caio por su lado, estaba muy devil
como para poder objetar cualquier intromisión de otros vampiros.
Así pasaron 15 días, mi cuello sanó aun que la herida dejo
una gran cicatriz.
-
Me
gusta- hablo Alec y beso mi cuello. Sonreí complacida a pesar de que la
cicatriz era horrible.
-
A
mi no- me sinceré, mientras me terminaba de poner los pantalones negros. Hoy
seria un día muy importante y tenia que estar presentable. Alec me abraso por
la cintura y me beso de nuevo el cuello haciendo que una corriente eléctrica
pasara por toda mi columna vertebral.
-
Te
vez sexy y mala. Me encantan las chicas malas…- dijo el y me mordió ligeramente
el cuello. Sin hacerme daño solo demostrándome que estaba allí.
-
Y
a mi gustan los chicos como tu – dije y gire para quedar justo frente a
frente.- te amo.
-
Y
yo mas que a mi vida.- hablo el y pego nuestras frente mientras me abrasaba con
mas fuerza.
-
Tengo
miedo…- dije después de unos segundos
-
De
que? – pregunto el y yo suspire.
-
De
todo lo que nos espera afuera. Mi hermana debe de estar destrozada, la familia
de Sam ni que decir. La corte esta desecha y quien sabe que pasara con el
liderazgo de todos los vampiros ahora que Aro esta tan perdido y nadie confía
en el.
-
Quiero
que estés segura de algo- hablo Alec y levanto mi mentón con una de sus manos.
-
De
que?
-
De
que pase lo que pase, lo afrontaremos juntos, lograremos salir adelante,
lo prometo.
-
Tu
siempre tan optimista- dije con una ligera sonrisa y lo bese en los labios.
-
Soy
optimista solo por que estas tu para sonreírme cada mañana- dijo el y me abraso.-
anda, ponte los zapatos ya, que llegaremos tarde a la decisión de la corte.
-
Ok.
Después de tres horas interminables los vampiros presentes
tomaron una decisión trascendental. Era obvio que Aro ni Caio estaban en
condición de liderar la corte además de que, después de saber lo que había
hecho Aro muchos de sus seguidores estaban inconformes y ya no confiaban
en el. Por decisión casi unánime se formo un consejo de cinco grandes
aquelarres de vampiros, entre ellos estaban los Cullen y todos ellos se
encargarían de velar con las reglas como antes lo hacían los Vulturi aun que,
supongo que desde ahora todo seria mucho mejor.
Cuando se hablo de disolver el aquelarre de los
Vulturi mas de la mitad decidió que seria mejor retirarse y así solo quedaron
los fieles, como Jane, Pascal, Demetri, Felix entre otros. Alec y yo decidimos
y por nuestro propio camino. Después de todo ya no pertenecíamos allí hace
mucho.
Regresamos por un tiempo a Paris donde todo fue realmente
peor. La tristeza había invadido el hogar de mi hermana, el aquelarre de
vampiros, humanos y licántropos se disolvió por completo. Cada uno se fue por
su propio camino dejando a mis hermanos solos junto a Jack. Decidí entregarle
la casa y el dinero que mis padres habían dejado a Ali y Derek, después de todo
ellos querían seguir sus vidas en París y yo respetaba eso.
-
Y
ahora que?- le pregunte a Alec mientras observaba la luna llena.
-
No
lo se, tienes algún lugar en especifico o quieres regresar a nuestra antigua
casa? – pregunto el mientras me abrasaba por la cintura.
-
Creo
que esta vez quiero un lugar mas calido- dije con una sonrisa y me apoye en su
hombro.
-
Eso
va estar algo complicado si tenemos como referencia el sol- hablo el
-
Y
quien dijo que quería vivir en un lugar habitado por humanos- pregunte con una
mirada cómplice y Alec frunció las cejas algo confundido.- la selva tonto, esta
desabitada, podemos hacer lo que queramos allí…
-
Y
hace calor- dijo con una sonrisa perfecta.
-
Exacto.
-
Pero
primero quiero que hagas algo por mi.- dijo el
-
Lo
que quieras…
-
Entrenemos
a la secundaria de nuevo, a cualquiera solo quiero terminar lo que iniciamos un
dia juntos.
-
Me
estas mandando una indirecta verdad? Quieres que…- no pude concluir por que
Alec me dio un beso cargado de energía que me dejo algo embobado.
-
No
te estoy mandando una indirecta solo quiero rememorar el inicio de mi vida
perfecta junto a ti.
-
Vale,
amor. Si quieres volver al lycée lo haremos.
-
Te
amo
-
Y
yo a ti.
Epilogo
Marcus:
Es difícil iniciar esta carta y es que ya han pasado 10
años desde tu partida, 10 largos años en los que no se nada de ti. Aquel
nefasto día me dijiste que estarías en el lugar que te hacia mas feliz en este
mundo de decepciones . Espero no haberme equivocado, espero estar mandando las
cartas al lugar correcto y es que, en verdad deseo, de todo corazón, que hayas
leído cada una de las cartas que te mande con tanto cariño, a lo largo de todos
estos años. En las cartas siempre te hablaba de Alec, de mi y de nuestra nueva
vida en Brasil por que pensé que no querías saber nada de los demás, sobre todo
de los Vulturi, pero ya no. En verdad no te culpo por no responder, por no
querernos ver, se que quizás no quieras saber nada de los otros pero esta será
la ultima carta que te escriba y es necesario que te diga todo lo que pasó
desde tu partida.
Hace 10 años perdimos a mucha gente en la batalla contra
Diana. Muchas personas importantes para mi, como la joven licántropo Sam, el
inexperto Z, el valiente Leo, la cariñosa Sulpicia y muchos nuevos de la corte,
todos ellos se fueron en esa batalla. Además de que muchos otros quedaron muy
heridos, como Caio que casi pierda la vida, Jack o hasta el mismo Alec. Yo
hubiera corrido la misma suerte si tu no me hubieras defendido contra Diana y
por eso te estaré eternamente agradecida. La partida de esas personas fue muy
dolorosa para todos. Nada volvió a ser lo mismo y no solo por eso sino por que
al revelar Diana el secreto de Aro nadie mas volvió a confiar en el y tu
desapareciste para siempre. Ahora el aquelarre de los Vulturi a perdido el
poder que tenia antes, la mayoría de los miembros de la corte prefirieron
desaparecer antes de tener un líder como Aro. Actualmente los Cullen y otros
dos aquelarres mas están encargados de velar las leyes que nos rigen y créeme,
todo esta yendo mucho mejor ahora.
Hace poco recibí una carta de mi hermana, es la única
forma de comunicarme con ella ya que, actualmente vivo al noreste de Brasil en
una zona muy adentrada en la selva, pero eso ya te lo dije anteriormente así
que te contare lo que decía en la carta. En ella hablaba de Derek, mi pequeño
hermano. Al fin se gradúo y le propuso matrimonio a una humana llamada Cintia,
no es lindo? A mi me alegro de sobre manera saber eso, lo que me apena es que
ya tomo la decisión de ser normal y no convertirse en uno de nosotros. Ali
también me hablo de su relación con Jack, aun no son nada porque mi hermana
sigue dolida por la partida de Leo pero dice que Jack no pierde las esperanzas,
espero que algún día sean felices juntos. Por ultimo me hablo del loco Fred y
la pequeña Bree que ya no esta tan pequeña. Crearon un centro de valet en
Londres y les va muy bien, los llaman los hermanos Clain.
Por el lado de la familia de Alec, esta Jane, testaruda
y fiel como siempre prefirió quedarse con la corte, junto a Pascal y los otros
fieles. Ella dice que Aro no es el mismo de antes, siempre esta cayado y muy
serio. Prefiere no tocar a nadie para no usar su don. Su única obsesión es
encontrar a mas vampiros con dones pero no le esta yendo muy bien. Caio por su
lado a decidido cazar a todos los hijos de la luna que quedan, a mi parecer
tiene temor de que venga otro y esta vez si lo mate pero los hijos de la luna
son muy inteligentes y según las cartas de Jane, aun no a logrado matar a
ninguno, será que ya extinguieron todos?
Eso es todo lo que te quería decir, si te preguntas como
esta Alec y yo pues la respuesta es muy bien, hemos conseguido un pasatiempo
nuevo. Nos encargamos de deshacernos de los malos, suena raro no? pero es
verdad, la anterior semana estuvimos en Río de Janeiro y pues encontramos a mas
de 10 convictos. Es divertido debo admitir y excitante, como las películas
policíacas solo que nosotros si vengamos muy bien los asesinatos que ellos
cometieron.
Te quiero mucho Marcus y espero que tu nueva vida sea
mucho mejor que la anterior.
Hasta siempre,
Mía Delaviu
[…]
- escribiéndole una carta a Marcus?- pregunto Alec tocándome
la espalda con cariño y sentándose a mi costado. Gire la cabeza ligeramente y
le di un gran beso en los labios.
- Terminando la ultima carta para Marcus- corregí mientras
metía la carta en un sobre color rojo.
- Que bien por que hoy es un grandioso día y tengo
muchas cosas por hacerte- dijo con una sonrisa picara mientras me levantaba en
brazos y comenzaba a caminar hacia la laguna. Yo sonreí placidamente. Amaba a
mi Alec y el siempre tenia nuevas cosas para mi, jamás me aburriría con el.
Corrió lo mas rápido posible hacia la laguna con migo en sus brazos y juntos
nos lanzamos al agua tibie y fresca. No puedo decir cuanto tiempo paso entre
juegos y besos dentro del agua solo puedo decir que cuando salimos ya era de
tarde. Nos sentamos en el muelle, viendo juntos el atardecer y tocando
ligeramente el agua con nuestros pies.
- Puedo hacerte una pregunta?- le dije mientras
entrelazaba nuestras manos y lo miraba a los ojos. El me miro con una calida
sonrisa.
- Claro Mimi. Dime!- dijo alentándome y los dos
comenzamos a ver el atardecer.
- Que esperas del futuro?- le pregunte y el volvió la
mirada y clavo sus ojos color rubí en los míos, se veia confuso por la
pregunta.
- Y esa pregunta?
- Alec, responde, has dicho que lo harías
- Sinceramente no lo se….que valla todo muy bien, no?-
dijo con total naturalidad y apretó un poco mas mi mano.
- Solo eso?
- Bueno…solo eso no. me olvidaba de lo mas importante.-
dijo y puso con total delicadeza su mano en mi rostro y hablo con dulzura- Que
tu estés en el a cada instante, en cada rincón, en cada historia, en cada parte
de mi, de ti, de los dos. Que nuestro amor sea permanente, infinito, para
siempre… Te he contestado lo suficiente?
- Infinito y para siempre- dije con una gran sonrisa y
no aguante mas, me aválense sobre el y bese sus labios.
- Que acaso nunca veremos el atardecer completo?-
pregunto Alec entre besos y con una gran sonrisa
- Al parecer el atardecer no es tan lindo y perfecto
como tu- dije y fundí nuestros labios en otro beso mas tierno, que quise fuese
infinito.
[…]
Alecon- Baja Normandía
En lo alto de la torre mas alta de la ciudad de Alecon
un hombre con capa negra acompañado de dos muchachos grandes y fuertes
custodiaban la ciudad parisina, ocultos por la oscura noche de invierno.
- Le a llegado esta carta señor- dijo una muchacha
delgada, cabellera totalmente negra y ojos plomos como la luna.
- Gracias Amelie- dijo el hombre con total amabilidad
mientras recibía el sobre color rojo. Leyó la carta rápidamente, la estaba
esperando con ansias todos estos meses y al fin había llegado. El hombre
termino de leerla y un sentimiento de pena mezclado con culpa lo albergo. Sin
decir nada entrego la carta a uno de los hombres que estaba a su costado. Este
lo leyó muy rápido y con una sonrisa vio a su líder.
- Mía Delaviu es muy inteligente supo muy bien a donde
mandar las cartas todo este tiempo.- su líder asintió
- La pequeña Mía siempre fue muy inteligente.
- Déjame, leer- dijo el muchacho que estaba al otro
costado. Después de leerla sonrío de oreja a oreja y sus ojos color plata
resplandecieron mas que nunca.
- Aun que algo ingenua, pensar que nosotros los hijos de
la luna ya no existimos, que engaño!- dijo con una risotada.
- Señor Marcus, responderá sus cartas alguna vez?- le
pregunto el otro muchacho a su líder. El volteo y vio los ojos de ese hijo de
la luna. Y pensar que hace unos años era enemigo de ellos y ahora 10 años después
todo había cambiado. Se había ganado el respeto de sus enemigos por naturaleza
y ahora era su líder. Marcus estaba consiente de que su lealtad hacia ellos era
lo primordial, no solo por que le habían salvado la vida aquella noche de la
nefasta batalla sino que también le habían devuelto las ganas de vivir, de
luchar por una causa justa, la libertad. Marcus negó con la cabeza.
- Es mejor que no sepa que
sigo vivo, eso pondría en peligro nuestra misión y no estoy dispuesto a permitirlo.
Ohh me encanto Lu! Entonces seguirás mas con la historia no? porque tienes que explicar lo que ocurre después de la gran pelea! jaja Eres increíble.
ResponderEliminarValkiria
que lindo es zuper mega wow que mal ellos ojala no le pase nada a mia Y soy tu seguidora desde que lei el primer parrafo de la historia!!!
ResponderEliminarBy. Ella (vicky) G.
hola!¡!¡
ResponderEliminarnoo noo!!..me encanto el cap...y mas qe ayas decidido seguir con la historia d mia y alec..aunqe sean unos cuantos capitulos...pero por lo menos es algo...xD
besos
*karla*
Holaa! Oye esta la 2/4 ??
ResponderEliminarY otra pregunta quien se supone que estaba con Alec? Effy no era verdad??
tengo dos historias, este es el final de la primera historia en la que esta con Mia Delaveu.
ResponderEliminarHOLA LU
ResponderEliminarQUIERO FELICITARTE POR TU HISTORIA REALMENTE ESTA ESPECTACULAR. ES LA PRIMERA HISTORIA LEO QUE TRATA DE UN VOLTURI Y QUE A LOGRA LLAMAR MI ATENCION. NUNCA HABIA LEIDO UNA PERO TU HISTORIA DE MIA Y ALEC ME A FASINADO. ESPERO QUE PUBLIQUE PRONTO EL CAP 2/4 Y QUE TE ANIMES A DAR DETALLES DE LA BATALLE YA QUE QUISIERA SABER CUAL ES ESE SECRETO DE ARO QUE DESTRULLO CASI AL COMPLETO CON LA CORTE.
POR FAVOR SI PUEDES ESCRIBE UNA TEMPORADA O UN ESPECIAL QUE TRATE SOBRE LA BATALLA, EL SECRETO DE ARO,EL PORQUE MARCO ESTA CON LOS HIJOS DE LA LUNA Y NO LE ESCREBE A MIA,LOS CULLEN CUIDANDO EL SECRETO,Y SOBRE TODO ME GUSTARIA QUE ,JANE,PASCAL,ALEC,MIA Y SU FAMILIA FORMARA UNA FAMILIA COMO LOS CULLEN TODOS UNIDOS Y FELICES.
BIEN LU ME DESPIDO BESOS DESDE PUERTO RICO
CATHERINE
P.D SI PUEDES CONTESTAME O MANDAME TU OPINIÓN A MI MAIL cintron.catherine1@gmail.com ESPERO TU PRONTA RESPUESTA Y SIGUE ADELANTE ESCRIBIENDO QUE ERES UNA DIOSA EN ESTO
Hola Lu!!
ResponderEliminarCuando seguiras con el cap final de Mia y Alec?? Esqe la intriga me está carcomiendo!!! Necesito saber como se llego hasta el epilogo. Te agradecería muchisimo qe la continuases!! :)
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